¿Estás fijándote propósitos para el nuevo año? Advertencia: más de la mitad de todos los propósitos fallan. Según un estudio publicado en el Journal of Clinical Psychology, solo el 46 % de las personas que se fijaron propósitos de Año Nuevo los cumplieron. ¡Es decir que más de la mitad de las personas que establecieron una meta para el nuevo año fracasarán! Pero este año, no tienen por qué ser los tuyos… O los nuestros, ya que una breve charla con algunos de nuestros colegas demuestra que -bueno- cómo decirlo, el estudio tiene razón… :)

Así que comencemos con algunos propósitos que podrían ser inspiradores para el nuevo año:

  • Adopta una actitud de gratitud
  • Haz trabajo voluntario más a menudo
  • Llama más a tus padres/hermanos/abuelos
  • Completa un desafío para ahorrar dinero
  • Prueba algo nuevo cada mes
  • Deja un mal hábito
  • Procura la espontaneidad
  • Toma un descanso de las redes sociales de 24 horas por mes
  • Adopta la regla de “lo haré ahora”
  • Lee un libro al mes
  • Tómate un tiempo para apreciar tus logros

Todo listo, propósitos fijados. Ahora, apegarse a ellos es lo que me parece más difícil.

En primer lugar, sé específico al fijarte propósitos

Metas incorrectas que podrían ser poco fáciles de cumplir. Afortunadamente, el marco INTELIGENTE de establecimiento de objetivos puede ayudar a elaborar mejores objetivos.
Los objetivos SMART son:
Específico: fija el propósito de la manera más clara posible. Por ejemplo, dejar de fumar es mejor que estar sano. Si bien “estar sano” es ideal, la redacción se puede interpretar de muchas maneras.
Medible: cuantifica tu propósito si es posible; es decir, perderé el 10 % de mi peso corporal.
Alcanzable: elige una meta dentro de las posibilidades, pero que implique un desafío. Hacer 100 amigos este año sería increíble, pero puede ser bastante difícil de logar. Por otro lado, hacer 10 amigos nuevos es factible.
Relevante: que sea pertinente en cuanto a tus prioridades y objetivos. ¡Consulta la sección de motivación, arriba!
En función del tiempo: establece un plazo de tiempo para lograr un objetivo. Una fecha límite infundirá cierta urgencia y propiciará un momento para celebrar tu éxito.

Escribe tus objetivos

No interesa cuán importantes creas que son los propósitos, cuando vuelvas al trajín de la vida diaria, podría ser fácil que te olvides de ellos. Puede parecer una tontería, pero somos humanos, y es humano distraerse y olvidarse fácilmente.
Escribir tus propósitos te ayuda a tener en claro qué quieres lograr. Te obliga a tomar decisiones y a ser preciso en tus propias palabras.
La escritura establece la intención, pero es necesario tomar medidas para que puedas cumplir con tu propósito. Tener una lista por escrito de tus objetivos es un recordatorio constante para tomar medidas.

Prepárate mentalmente para el cambio y mantente positivo

Algunas de los propósitos podrían haber estado en la lista del año pasado también, ¿verdad? Así que quizás no sea fácil. Puede que retrocedas o que sientas la tentación de rendirte nuevamente. El cambio no es fácil. No es suficiente establecer una meta, el camino para alcanzarla está lleno de dificultades. Así que mantente positivo, por más difícil que se ponga; refuerza tu confianza y retoma el esfuerzo. Para mantenerte en el buen camino, sería una buena idea celebrar las pequeñas victorias. ¡Esos sentimientos de felicidad son útiles! Si es posible, trata de asociarlos con un objeto o una palabra relacionada con el logro.