¿Recuerdas cuando éramos niños y soñábamos con convertirnos en adultos? Pues bien, ahora que “el sueño se hizo realidad”, miramos hacia atrás y vemos el niño que solíamos ser y sonreímos con nostalgia… Si supiéramos que, de algún modo, ESOS fueron mejores momentos. Tal vez habríamos reído más, nos habríamos enfadado menos, habríamos disfrutado más del tiempo que pasamos con nuestros seres queridos.
Y lamentablemente, todavía no se ha inventado ninguna máquina del tiempo, así que no podemos volver atrás y ser niños. Lo que podemos hacer es hacer un corto viaje por la memoria. Hoy, te invitamos a volver a Cuba, a los años de la infancia y a las calles empedradas. Esta imagen no está completa sin las voces alegres de los niños jugando alrededor. ¿Puedes imaginarlo? Ahora veamos qué juegos están jugando…

Juego del taco

El juego del taco era tan popular como el de cuatro esquinas, pero en esta competencia había que jugar por parejas. Se dibuja un cuadrado en una pared para señalar la zona de strike. En lugar de una pelota, se utiliza normalmente un bloque pequeño de madera o un trozo de goma que se lanza con fuerza contra la pared para intentar ponchar al bateador. El bateador se vale de un bate improvisado o de cualquier tipo de palo y cuando supera a la defensa en la zona de seguridad, logra una carrera. El equipo ganador es el que consiga el número de carreras que se haya decidido con antelación.

Cuatro esquinas

Muchas generaciones de cubanos han disfrutado de cuatro esquinas… El juego requiere cuatro jugadores: uno que defiende la primera base, otro que juega en la segunda, otro en la tercera y un cuarto jugador situado entre la segunda y la tercera. La regla básica es no batear entre la primera y la segunda base. Además, se camina desde el home hasta la primera base. Luego de llegar a la primera base, se puede correr o caminar (como lo hayan acordado los jugadores) y, al retroceder de una base a otra, los jugadores tienen que caminar. El atacante siempre debe golpear la pelota con el puño cerrado.
Existen distintas versiones de cuatro esquinas, si recuerdas alguna otra, compártela con nosotros en Facebook.

El gato y el ratón

Es la versión cubana de Tom y Jerry :) El gato tiene que atrapar al ratón, que debe escapar pasando por debajo de los brazos de los que integran la cadena. Quienes integran la cadena, cuando el ratón desee pasar, levantarán los brazos para facilitar el paso y los bajarán cuando el gato intente pasar. Parece divertido incluso para los niños de hoy en día, ¿cierto?

Ahora que hemos abierto esta puerta nostálgica, te invitamos a compartir tus recuerdos.